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Fernando García anuncia su decisión de no continuar como presidente ejecutivo
Fernando García lo ha revelado esta mañana ante los medios de comunicación, información que ya trasladó a los miembros de la Junta Rectora el pasado martes durante la reunión ordinaria de la misma. Acompañado del alcalde de Elche, Carlos González, la concejala de Cultura, Patricia Maciá, el rector de la Basílica de Santa María, Ángel Bonavía, el vicario episcopal, José Antonio Valero y un nutrido grupo de patronos, ha manifestado que “ante la inminente renovación de la mitad de los miembros que componen la Junta Rectora, les traslado mi decisión de no continuar como presidente ejecutivo del Patronato del Misteri d’Elx”. En su intervención ha manifestado que “es una determinación muy meditada, que he tomado con la cabeza y el corazón”. Considera que es el momento de dar un paso al lado y dejar que otra persona con nuevas energías y decidida a emprender, tome las riendas de este ilusionante reto con determinación. Tras un somero balance de sus seis años de gestión, ha dedicado palabras de agradecimiento a todos los componentes del Misteri d’Elx, desde los miembros del Patronato, pasando por todos los sectores que participan en la representación, la capella, los medios de comunicación, la Mare de Déu y espacialmente a su familia. Orgullo y gratitud han sido las palabras que resumen sus declaraciones “en marzo de 2012, los miembros de la Junta Rectora, depositaron su confianza en mi persona para la presidencia ejecutiva de la Festa, una responsabilidad que asumí con profundo orgullo, pues tenía ante mí, la misión de liderar a un importante equipo humano, en la tarea de mantener, conservar y difundir el bien más representativo y querido por todos los ilicitanos. Cada día de estos seis años, mi única ambición ha sido contribuir a dinamizar el Patronato y servir a los intereses generales del Misteri, lo que ha sido todo un honor y una gran satisfacción. Durante la comparecencia ha recibido muestras de cariño, reconocimiento y gratitud hacia su gestión y su persona, concluyendo con un ovacionado aplauso.